Panadería de otro siglo....
Creo que encontré una panadería como ya no se encuentran más.... Conocimos a Thierry y Elisabeth en el mercado de Plestin les Grèves en el año 2007 mientras esperábamos la llegada de la nietita... Nos gustó mucho el pan orgánico de Thierry y poco a poco nos hizimos amigos... Por esto aceptó que haga este artículo, el no vive con la internet y no le da importancia....
Acá se halla el amasadero... perdido en el campo de Bretaña.... no tienen tienda, venden sólo en los mercados o a la gente conocida alrededor...
Thierry nos explicó que el lo hizó todo en este lugar... Nomás tiene un ambiente la casita y Thierry la compró hace 25 años cuando perdió su trabajo.... Pueden notar la mesada de madera maciza y unos cuantos fuentones de plástico que usa para amasar el pan, los tejidos colgados que sirven para cubrir la masa mientras crece....
Al tiempo no había ninguna panaderia orgánica en esta parte de Francia y pensó que pudiera ser un buen proyecto crear una.... Compró de usado todo lo que no pudó fabricar el mismo, especialmente los ladrillos refractarios del horno que construyó (mide como 4 metros de diametro...).
Compró de usado tambien la artesa y le agrego un viejo motor eléctrico... Lo usa para hacer el pan blanco porque es el que se vende más... el resto lo amasa todo a mano...
Como vierón es un lugar cualquier... y distintísimo porque hoy no se encuentran mas que laboratorios y producción industrial...
En una panaderia, lo importante es el pan... y el pan es muy distinto según se usa una harina u otra, según se usa levadura de cerveza o levadura natural de trigo, según el horno, la temperatura.... Según la mano del panadero, y les cuento que Thierry tiene linda mano....
Así que vamos a pasar unos tiempos juntos con el para verlo todo....
En el próximo artículo les enseñaré como prepara el pan...
Pero por hoy me tengo que despedir por el poco tiempo que puedo usar la computadora... Somos cuatro que la compartimos con un montón de cosas importantísimas que hacer cada uno, la mas importante siendo, en mi opinión, compratir lo lindo del viaje con ustedes...
Chaú y besotes,
Maedes